Abrir un nuevo restaurante no se trata solo de tener una buena receta a mano. Requiere una planificación minuciosa, desde elegir la ubicación adecuada y obtener permisos legales hasta hacer marketing de la marca antes del lanzamiento. Seguir una lista de verificación estructurada ayuda a los nuevos restauradores a organizar cada paso de forma clara y eficiente. Mantiene las tareas enfocadas y evita retrasos, asegurando que no pases por alto elementos esenciales como los suministros de cocina.
Dato interesante: Según una encuesta de US Foods, el estadounidense promedio come fuera unas tres veces al mes y pide comida para llevar o a domicilio casi cinco veces al mes. La Generación Z muestra aún más interés, con 1 de cada 10 comiendo en restaurantes al menos una vez por semana. Con esta demanda constante, se espera que la industria de servicios alimentarios en EE. UU. crezca un 4–5 % en ventas para finales de 2025 respecto a 2024.
Ten en cuenta que cada decisión cuenta. Cada año, se abren alrededor de 50,000 nuevos restaurantes en EE. UU., y los de servicio completo generan un margen de beneficio de aproximadamente 9.8 %. Debes alinear tu concepto, operaciones e inversiones con el éxito a largo plazo. Aquí tienes una guía completa para nuevos propietarios sobre cómo hacer crecer su negocio rápidamente y crear una experiencia para el cliente que los motive a volver.
Decide qué tipo de experiencia gastronómica ofrecerás: comida rápida, cena informal o tipo cafetería. Tu visión guiará el menú, el diseño interior y la estrategia de precios.
Explora opciones como cocinas comerciales, cocinas fantasma o catering desde casa. Determina también tu público objetivo, por ejemplo, turistas interesados en especialidades locales.
Incluye presupuesto, fuentes de financiación, costos fijos y variables, e ingresos proyectados para presentar a inversores.
Registra el nombre de tu negocio y solicita los permisos requeridos. Este proceso puede ser complicado, así que empieza temprano o contrata un abogado especializado.
La ubicación impacta enormemente en el éxito. Estudia el vecindario, analiza la competencia y prioriza lugares con alto tráfico peatonal, visibilidad y estacionamiento.
Define cómo se verá, la capacidad de asientos y la distribución para mejorar la eficiencia del personal y la experiencia del cliente.
Evalúa las necesidades de tu cocina antes de comprar. Compra equipos básicos como hornos, refrigeradores y estufas, y elige proveedores confiables para mantener el presupuesto y la calidad.
Trabaja con proveedores que ofrezcan productos frescos y entregas puntuales.
Tu menú debe coincidir con tu tema, capacidad de cocina y expectativas del cliente. Incluye platos rentables y fáciles de preparar consistentemente.
Crea un equipo con personal de cocina, servicio al cliente y un gerente. Entrevista a fondo, verifica referencias y capacita a tu personal antes de la inauguración.
Define roles, proporciona uniformes y comunica claramente tus expectativas.
Implementa un sistema de punto de venta (POS) para gestionar pedidos y pagos. Acepta efectivo, tarjetas y billeteras digitales, e integra con apps de entrega si ofreces servicio a domicilio.
Empieza a promocionar antes de abrir. Crea redes sociales, un sitio web y colabora con influencers o blogueros gastronómicos para aumentar la visibilidad.
Haz una prueba general invitando a familiares y amigos para obtener su opinión. Revisa inventario y repón suministros esenciales. Coloca pedidos de último minuto si es necesario.
Abrir un restaurante es un gran compromiso, pero con una lista de verificación clara te mantienes en control. Planifica cuidadosamente, toma decisiones inteligentes y rodéate de un equipo capacitado para brindar una experiencia memorable desde el primer día.